Carta Abierta, una vez más: “es por vos y tus amores”

Tragedia de Circunvalación: a tres años, urge cambiar

A tres años de la tragedia en la que un conductor ebrio -que se dirigía por la transitada y peligrosa avenida de Circunvalación en zigzag a alta velocidad y adelantándose por banquina- asesinó a Agustín Burgos y a Sol Viñolo, y dejó en discapacidad permanente a Fernanda Guardia, las familias planteamos tres conclusiones que creemos muy valiosas de cara a la sociedad.

Primera conclusión:

La lucha enorme en las calles logró -por primera vez en la provincia de Córdoba y muy pocas veces en el país- una pena por Dolo para un crimen vial, lo que dejó una nueva jurisprudencia establecida y marcó el inicio hacia un nuevo paradigma pedagógico: Si no cumplís las normas viales y matás o provocás discapacidad es una categoría igual a matar con arma.

Sin embargo, una señal de alarma en nuestra provincia es que esta pena no ha sido aplicada nuevamente durante este tiempo trascurrido a pesar de que hubo claros casos de Dolo, como por ejemplo en el que murió el joven Luciano Gassman, atropellado en banquina. La gravedad esencial de esto es que los poderes judiciales sigan sin entender que su rol no sólo debe ser de castigo, sino que sus penas implican una verdadera “pedagogía” que sigue premiando la inconciencia de los conductores. Frente a la principal causa de muerte de la juventud argentina es necesario un inequívoco cambio de mensaje pedagógico, por una nueva conciencia: Al atravesar el umbral del no cumplimiento de normas viales graves (¡diseñadas para cuidar la vida!) te transformás en un potencial asesino; y tu vehículo automotor, en una potencial arma poderosa.  Creemos necesario preguntarnos: ¿Qué pasaría si esta conciencia estuviera presente? Y la respuesta es simple: se terminaría la principal causa de muerte de la juventud. Esto es lo que está implicado.

El reciente caso de un flagrante y violento asesinato vial en La Plata, que se hizo  muy conocido porque fue llevado adelante por una conductora que minutos antes había posteado en redes su desafío y juego con la alta velocidad en calles públicas, -lo que nos recuerda el asesinato de Amoedo posteando su apología de manejar con alcohol- debería llevarnos como sociedad a interpelarnos: ¿Qué está pasando para que se realicen socialmente este tipo de apologías que desembocan en la principal casusa de muerte de nuestra juventud?

Esto nos devela el grave problema de que en la sociedad existe una inconciencia colectiva instalada y estimulada, que se inicia en los poderes judiciales de la Argentina porque insisten en valorar los crímenes viales como meras situaciones de inconciencia psicológica, (teoría psicológica del dolo) y no como un problemas social y contextual objetivo.

Insistimos:  el momento marcado por el incumplimiento de la norma vial es el momento de conciencia en el que decidís atravesar el umbral hacia la potencial muerte, propia o de terceros.

Volviendo a la Tragedia de Circunvalación, el inmenso apoyo popular para lograr justicia y la búsqueda de este cambio social necesario, (“por Sol, Agus y Fer; por vos y tus amores”) que en nuestro caso fue protagonista masivo, nos demuestra que la sociedad quiere y está consciente de la necesidad social de cambiar de cuajo.

Segunda Conclusión:

Desde nuestro aprendizaje queremos destacar otros elementos también determinantes a los efectos de los siniestros viales, que marcaron -y siguen marcando- una línea divisoria absoluta entre la vida y la muerte. En la avenida de circunvalación (pero vale para otras), de alto tránsito y alta velocidad, no existen lugares diseñados para la detención obligada de los ocupantes de un vehículo averiado. En Francia, por ejemplo, en las rutas bajo concesión de peaje, como lo es este anillo de circunvalación, existe una vía exclusiva de circulación para emergencias, de bomberos, ambulancias y auxilios, y contiguo a ella espacios de detención con teléfono de emergencia para solicitar auxilio inmediato.

Hoy, luego de nuestro caso, se suple esta falta de elementos de seguridad con la asistencia de Caminos de las Sierras, la responsable, quien delega en la policía caminera, acudiendo a cuidar y asistir a quien se le queda su vehículo. Esto que es valioso (y seguramente ha salvado muchas vidas desde entonces) antes no se hacía; y esa ausencia de protección ante la inseguridad marcó la diferencia entre la vida y la muerte en muchos casos, incluido el nuestro.

En la Argentina aún no se han resuelto estas medidas de seguridad que tienen otros países, hoy es fundamental abordar este debate, ante la principal causa de muerte juvenil. Es necesario “humanizar” las rutas, caminos y espacios urbanos en general, donde este anillo de circunvalación debe atenderse con prioridad por su altísima peligrosidad, determinada por la alta fricción de entradas y salidas a altas velocidades. Su abordaje debiera ser un inicio de cambios en materia de seguridad para cuidar la vida.

Tercera Conclusión

Desde nuestro obligado y doloroso aprendizaje hoy nos toca transitar el de los juicios civiles. Aquí hemos descubierto un gravísimo problema social silenciado: a las familias que han sufrido la muerte y la discapacidad les toca padecer luego el abandono, durante años, a la espera de reparaciones económicas. Esta situación amerita un cambio drástico, en defensa esas familias que quedan devastadas, y fundamentalmente de las personas que quedan discapacitadas, en nuestro caso: Fer. Como lo mencionamos en una reciente carta a Caminos de las Sierras, demandada por su responsabilidad; al Gobierno de Córdoba en su carácter de dueño de esta sociedad anónima; a Seguros Nación como aseguradora; y al TSJ por el carácter que estos juicios implican socialmente: las reparaciones a las familias devastadas ante las muertes y discapacidades provocadas en un instante (una “bomba atómica” en el seno de cientos y miles y miles de familias en el país) no puede demorar años y años. Estas reparaciones deben ser inmediatas para atender vidas, y estas demoras deben catalogarse como crimen social. Y como también lo expresamos en carta abierta al Seguro de Amoedo, que pretende evadir su responsabilidad porque el conductor estaba ebrio: es una aberración social que esto siga sucediendo.

Es necesario un cambio urgente. En España y en la mayoría de los países de Europa, cuando ocurre un siniestro las aseguradoras siempre reparan el daño a la víctima y luego, si corresponde, le inician un reclamo a su cliente.

La obligación de reparar a las víctimas es un principio de Derechos Humanos de orden internacional, que surge de la responsabilidad de los demandados. En el caso de la Tragedia de Circunvalación, por responsabilidad subjetiva del demandado Sr. Amoedo y objetiva exclusiva de la co-demandada, Caminos de las Sierras S.A. por ser quienes forman parte de la concesión de la RAC y, en consecuencia, quienes debían suministrar todas las medidas de seguridad establecidas.

El criterio de las leyes de las compañías de seguro en Argentina intenta dejar a las víctimas sin reparación, pero por encima de las leyes de seguros está el Código Civil y las convenciones internacionales que responden a los estándares internacionales de reparación integral de las víctimas.

Hoy el juez de 5ta Nominación, donde se encuentra el juicio de la Tragedia de Circunvalación para su resolución, tiene una enorme responsabilidad en sus manos.

Y también la tiene el gobierno de Córdoba como dueños -accionistas 100 por cien- de la concesionaria Caminos de las Sierras.

Las familias destacamos que el juicio civil de la Tragedia de Circunvalación abre una oportunidad de cambios necesarios en favor de las familias que deben padecer las pérdidas de vidas humanas y atravesar discapacidades, muchas de por vida.

Estamos seguros que este cambio en la esfera civil, impactará en la necesidad de un cambio integral frente a este flagelo social.

A tres años de la Tragedia de Circunvalación y como les pasa a tantísimas familias, desde el dolor profundo por habernos arrancado a nuestros amados Agus y Sol y la discapacidad provocada en Fer, creemos que la mejor forma de honrar sus vidas –en una suerte de hilo conductor entre pasado, presente y futuro- es con un fuerte llamamiento al cambio, ante la principal causa de muerte y discapacidad de la juventud de nuestro país.

Familias de Agus, Sol y Fer. 

17 de mayo de 2024.

Día de la Conciencia Vial Activa en el seno de la UNC, -y de otros ámbitos que se van sumando-.